En un futuro lejano, los humanos se han extendido más allá de la Tierra y colonizaron planetas en todo el universo. Para proteger y mantener las leyes y regulaciones, se creó el Comando de Caballería. Dentro del Comando de Caballería había una unidad de operativos especiales conocidos como Star Sheriffs que funcionaban como agentes de campo, investigando crímenes y complots contra la seguridad. Su enemigo principal era una raza de criaturas no humanas conocidas como Outriders que saltaron a nuestra dimensión para conquistarla. Atacaron y destruyeron asentamientos para extraer varios metales o cristales del suelo. Los Outriders eran superiores en tecnología, poseyendo una legión de robots gigantes con una potencia de fuego asombrosa. Para tener una oportunidad, el Comando de Caballería desarrolló una nave prototipo conocida como la Ramrod que tenía la capacidad de convertirse de una nave espacial en un poderoso robot que podría luchar contra los Outriders en igualdad de condiciones.